Diferencia entre dolor muscular y dolor articular

¿Alguna vez te has preguntado cuál es la diferencia entre el dolor muscular y el dolor articular? Aunque ambos producen molestias y limitan nuestros movimientos, sus causas y tratamientos son distintos.

En este artículo aprenderás a identificar el origen de esas molestias para saber cómo aliviarlas de forma efectiva. ¡Sigue leyendo y aclara todas tus dudas!


¿Qué es el dolor muscular?

El dolor muscular, también llamado mialgia, se origina en los músculos y los tejidos blandos que los rodean.

Los músculos son un tipo de tejido contráctil que nos permite movernos y realizar fuerza. Cuando se lesionan o se inflaman, envían señales de dolor al cerebro.

Las causas más frecuentes del dolor muscular son:

  • Ejercicio físico intenso que genera pequeñas rupturas en las fibras musculares.
  • Lesiones musculares como calambres, desgarros o contusiones.
  • Acumulación de ácido láctico tras un esfuerzo.
  • Posturas incorrectas que sobrecargan la musculatura.
  • Falta de actividad física que produce debilidad muscular.
  • Tensión muscular por estrés o ansiedad.

El dolor muscular se caracteriza por:

  • Aparece durante o después del esfuerzo físico.
  • Afecta a músculos concretos.
  • Provoca sensibilidad y rigidez muscular.
  • Mejora con reposo y calor local.

¿En qué consiste el dolor articular?

El dolor articular, también llamado artralgia, se origina en las articulaciones donde se unen los huesos.

Las articulaciones permiten el movimiento al funcionar como bisagras entre los huesos. Cuando se inflaman o lesionan, generan molestias articulares.

Las causas más habituales del dolor articular son:

  • Artrosis o desgaste del cartílago articular.
  • Artritis como la artritis reumatoide.
  • Lesiones articulares como esguinces o luxaciones.
  • Infecciones que causan inflamación articular.
  • Acumulación de cristales de ácido úrico en las articulaciones.

El dolor articular presenta estas características:

  • Aparece al mover o presionar la articulación.
  • Está localizado en la zona de la articulación.
  • Provoca rigidez e inflamación articular.
  • Empeora con la actividad física.
  • Mejora con antiinflamatorios y reposo articular.

Diferencias clave entre ambos dolores

Aunque tanto el dolor muscular como el dolor articular limitan nuestros movimientos, existen diferencias clave para identificar el origen:

  • El dolor muscular aumenta con la actividad física, mientras que el dolor articular empeora con el movimiento.
  • El dolor muscular suele describirse como una molestia sorda o agujetas, el dolor articular tiende a ser más agudo y localizado.
  • El dolor muscular se presenta de forma más difusa en zonas amplias de la musculatura, el dolor articular está mejor delimitado en la articulación afectada.
  • La rigidez y limitación de movimiento suelen ser mayores en el dolor articular comparado con el dolor muscular.

Teniendo claro estas diferencias podrás distinguir si tus molestias se deben a una lesión muscular o articular. Esto te permitirá aplicar el tratamiento adecuado.

¿Cómo aliviar el dolor muscular y articular?

Dependiendo de si se trata de un dolor muscular o un dolor articular, existen diferentes medidas para aliviarlo:

Para el dolor muscular:

  • Reposo la zona afectada para permitir la recuperación muscular.
  • Aplica frío local para reducir la inflamación.
  • Toma antiinflamatorios para disminuir la inflamación.
  • Realiza estiramientos suaves tras el ejercicio físico.
  • Recibe masajes para relajar la musculatura contracturada.
  • Aplica calor con bolsas térmicas o baños calientes.
  • Usa geles tópicos con aloe vera y árnica como SinDolor Sport Forte en crema para disminuir la inflamación y el dolor muscular.

Para el dolor articular:

  • Evita actividades que sobrecarguen las articulaciones inflamadas.
  • Usa vendajes compresivos para inmovilizar y proteger la zona.
  • Toma medicamentos antiinflamatorios para disminuir la inflamación.
  • Aplica frío local para reducir la hinchazón articular.
  • Realiza ejercicios suaves de movilización articular.
  • Recibe sesiones de fisioterapia y rehabilitación.
  • Aplica geles tópicos con aloe vera y árnica como SinDolor Gel Roll-On para aliviar el dolor e inflamación en las articulaciones afectadas.

Como ves, existen diferencias notorias entre el dolor muscular y articular. Aprender a distinguirlos te permitirá aplicar el tratamiento correcto y aliviar estas molestias tan frecuentes.

¡Esperamos que esta guía te haya sido útil!


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